domingo, 10 de julio de 2011

INSIDIOUS

Tras revolucionar el cine de terror allá por el lejano 2004 con la inteligentisima 'Saw', el director nacido en Malasia James Wan nos vuelve a sorprender con su nueva propuesta. En esta su cuarta película, tras la aburrida 'Sentencia de muerte' (2007) y la más que correcta y angustiosa 'Silencio desde el mal' (2007), le da la vuelta al tema de las casas encantadas, ofreciendo algo novedoso dentro de este genero tan trillado. Un claro homenaje al cine que veía cuando era niño, con claras influencias de la sobrevalorada 'Poltergeist' dirigida por (al menos eso dicen) Tobe Hooper.
Leigh Whannell escribe el libreto de esta aterradora cinta, además de aparecer como actor ocasional en la misma. Algo ya habitual en todas las películas de su socio y amigo James Wan (lo hemos podido ver también en 'Saw' y 'Sentencia de muerte'). Un guión más que correcto, si tenemos en cuenta los últimos productos de terror al que nos tienen acostumbrados desde Hollywood. El libreto se toma su tiempo para presentarnos a los personajes, apartándose de ese cine de terror sangriento y lleno de vísceras que inundan los cines actualmente, moviéndose más por los terrenos clasicistas del género.

Josh y Renai son una pareja feliz, padres de tres niños, que deciden mudarse a una casa más grande. Uno de sus hijos sufrirá un accidente (a priori) sin importancia que lo sumirá en un profundo coma, algo que los médicos no serán capaces de explicar. A partir de ese momento la familia comenzara a sufrir toda clase de experiencias paranormales.
Patrick Wilson ('Watchmen') y Rose Byrne ('X-Men: Primera Generación') forman la pareja protagonista, secundados por Barbara Hershey ('Cisne Negro') y Lin Shaye ('2001 Maníacos'). Todos ellos correctos, sin sobresalir ninguno por encima de otro.
Parece mentira que este película haya sido realizada utilizando un ínfimo presupuesto, 1,5 millones, ya que en pantalla lucen como si fueran 50. Esto es gracias al buen uso que hace su director de los limitados medios que posee y que demuestra que no hacen falta elevados presupuestos para realizar una buena película, si se posee algo de imaginación.

Los efectos digitales brillan por su ausencia, centrándose más su director en la utilización de medios más clásicos para provocar desasosiego y terror entre los espectadores. Para ello se ayuda de unos increíbles efectos de maquillaje, una fotografía en la que predominan las sombras y la oscuridad, efectos de cámara y una terrorífica banda sonora que nos tiene en tensión durante toda la película.
La recreación del mas allá sorprende por su teatralidad, en la que se nos presenta a los espíritus errantes como marionetas o muñecos inertes de terroríficas facciones.
El que conozca el cine de Wan sabrá que, como ya es habitual en su cine, nos espera una sorprendente final tras el falso final feliz.
Una de las mejores películas de terror vistas en los últimos años, que nos ofrece algo novedoso dentro del género y que nos provocará más de un salto en la butaca.

2 comentarios:

  1. En líneas generales el género de terror actual me ha dado muchísimas más penas que alegrías, y tengo que escarbar mucho para encontrar una película que me satizfaga e inquiete. En este caso pienso que Insidius logra hacer algo decente y con ideas curiosas con un presupuesto más que limitado pero bien aprovechado, aunque tampoco veo en ella esa obra maestra revolucionaria que muchos han afirmado que es.

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  2. A mi me pasa lo mismo, el terror cada vez me parece más flojo (salvo algunas excepciones).

    Esta en concreto tengo ganas de verla.

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