jueves, 18 de agosto de 2011

THE PRISONER

Reinvención de la famosa serie británica de los 60, creada y protagonizada por Patrick McGoohan. Una serie adelantada a su tiempo en la que a menudo se trataban temas algo surrealistas para la época: hipnosis, drogas alucinógenas, robo de identidad, control mental, etc... Conviertiéndose en objeto de culto rápidamente y en un fenómeno social que influyo bastante en la cultura de la época. 

El productor y guionista Bill Gallagher es el encargado de ofrecernos esta remodelación casi total de la serie original. Proyecto con el que encandilo a la cadena televisiva 'AMC' ('Mad Men' y 'Breaking Bad'), la cual se asocio con la británica 'ITV' para llevar a cabo la producción de dicha serie.
Número 6 aparece inconsciente en un desierto, desorientado y perdido sin saber donde se encuentra. Este desierto rodea 'La Villa', un lugar idílico y 'azucarado' donde nunca ocurre nada malo y todos sus habitantes son identificados por un número. Gobernada por Número 2, un especie de dictador que dirige el lugar con mano férrea.


El reparto esta formado por: un excelente Jim Caviezel ('La Pasion'), que logra transmitirnos el desasosiego y la duda que rodea a su personaje, el siempre soberbio Ian McKellen ('El señor de los Anillos') dando vida al villano de la función, la guapísima Ruth Wilson ('Luther'), Lennie James ('Escudo humano'), Jamie Campbell Bower ('Camelot'), Hayley Atwell ('Los pilares de la Tierra') y Rachel Blake ('Sin Control').
Al tratarse de una mini serie de 6 episodios, su ritmo y velocidad nunca decaen debido primordialmente a su fluidez narrativa y a la no existencia de historias paralelas que ralenticen la historia.

La dirección artística es impresionante, donde sobresale la creación de 'La Villa'. Donde se dan la mano lo idílico y lo almidonado (parece sacada de los años 50), una postal algo inquietante y perturbadora (demostrando que también se puede dar miedo sin recurrir a lo grotesco y oscuro).
Para poder disfrutar de esta serie sin complejos tenemos que olvidarnos de la original, porque a pesar de que parte de un punto de inicio algo parecido luego se aleja de la misma años luz. Optando por un clima opresivo y claustofóbico que le da aspecto de thriller psicológico con algunas gotas de ciencia ficción.
Como dato curioso reseñar que el propio McGoohan rechazo la oferta de los productores de hacer un pequeño cameo en el piloto de la serie.
Destacar el homenaje a la serie original realizado en el episodio piloto. Las ropas que lleva 93 antes de su muerte son las mismas que vestían los prisioneros de la serie original.
Una serie que debido a su interesante planteamiento, las numerosas preguntas sin respuesta que plantea y a ese halo de misterio que la rodea te mantendrá enganchado hasta su último episodio. Hubiese sido una digna sucesora de la magistral 'Perdidos', de no ser por su corta duración (una autentica pena).

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